Cuando a LinkedIn le da por ahí, y es muchas veces, nos sorprende a todos con alguna novedad en su perfil. Es entonces cuando debemos ponernos las pilas para optimizar nuestro perfil de LinkedIn adaptándolo a los nuevos cambios.
Recientemente, a principios de este año, LinkedIn incorporó en su diseño de perfil los cambios más drásticos desde hace tiempo. Y es que te habrás dado cuenta que desde entonces, tu perfil de LinkedIn no es el mismo. Un lavado de cara completo que afectó de lleno a las principales secciones de los perfiles de LinkedIn.
Por eso, hoy quiero hablarte de todos ellos para que aprendas a optimizar (si no lo has hecho ya) tu perfil de LinkedIn. ¡Vamos a ello!
A grandes rasgos, podemos decir que el “nuevo” perfil de LinkedIn es mucho más visual. Personalmente, creo que se me asemeja mucho al diseño de una app móvil, como para que no haya muchas diferencias del ordenador a la app de LinkedIn.
Todo el peso recae sobre la parte superior de tu perfil: la foto, el titular profesional, el principio de tu extracto… Por lo que deberás prestar especial atención a estas secciones.
Ahora, el espacio en el que va tu foto de perfil de LinkedIn es circular. Lo cual la hace mucho más visible y llamativa. Así que, por favor, elige ante todo una FOTO PROFESIONAL. No vale la misma foto que tengas en Facebook (a no ser que ésta cumpla también con los cánones de LinkedIn).
Elige una foto profesional en la que salgas sonriendo (sin exagerar), mirando al frente y tú solo, nada de salir acompañado de tu perro, hijo, mejor amigo… En tu foto de LinkedIn el protagonista eres tú, así pues evita todo lo que pueda distraer la atención de tu cara.
Parece obvio, pero te aseguro que he visto cada foto por ahí, que de profesional no tiene nada. Existen algunos ejemplos de fotos que no le hacen ningún favor a tu perfil de LinkedIn.
Es la parte más importante del perfil y, por lo general, la más descuidada. Sabes que, junto a tu foto y tu nombre, tu titular profesional te acompaña a todas partes en LinkedIn. ¿Por qué lo descuidas entonces?
Elige un titular profesional que realmente te posicione dentro de tu sector. No incluyas ni tu cargo, ni tu empresa, ni el famoso “búsqueda activa de empleo”. Sé creativo y añade una propuesta de valor.
Con la versión anterior, el extracto aparecía desplegado. Ahora, quien quiera leer tu extracto al completo deberá clicar en “ver más”. Algo que, lógicamente, sólo hará si el principio del mismo le ha llamado la atención.
Por esta razón, escribe al principio dos frases estupendas que te ayuden a que tus visitas quieran conocer más de ti. No es fácil, pero merecerá la pena conseguirlo. Hace poco escribí un post sobre esto: “Tu extracto LinkedIn es ahora un titular de dos frases”.
La gran mayoría de usuarios de LinkedIn no lo saben, pero la imagen de fondo de perfil de LinkedIn puede personalizarse. Y, de hecho, te recomiendo firmemente que lo hagas. Sólo tardarás unos minutos en personalizarla y son muchas las ventajas que obtendrás a cambio.
Gracias a esto, podrás diferenciarte del resto de profesionales, incluir tus datos de contacto en un lugar altamente visible y ofrecer un apoyo visual a lo que cuentas en tu perfil de LinkedIn.
Antes de hacerlo, no pierdas de vista este post en el que te explicamos cómo hacerlo. Presta especial atención a las medidas que debe tomar tu fondo de LinkedIn porque no todas valen, pero nosotros hemos dado con las idóneas.
En la parte superior de tu perfil de LinkedIn está visible tu actividad más reciente en la red. Así que, cuidado con lo que compartes/recomiendas/comentas. Publica sobre todo contenido que te ayude a potenciar tu imagen de marca personal.
Sólo están visibles a primera vista las 3 primeras aptitudes. Así que, elígelas bien, que sean aquellas que mejor te definen y te diferencian como profesional dentro de tu sector.
En cualquier momento puedes reordenar tus aptitudes y hacer que pasen a ocupar las 3 primeras posiciones las que tú quieras; pero eso no invalida lo que acabo de decirte: elígelas siempre bien.
Ahora, tus datos de contactos no están integrados dentro del propio perfil de LinkedIn (se muestran a su derecha). Por esta razón, te recomiendo que los incluyas en otras secciones de tu perfil como pueden ser el extracto o en tu fondo de LinkedIn, por ejemplo.
En la sección Logros se agrupan una serie de apartados que antes tenían entidad propia. En concreto, esta “macro sección” incluye, entre otros, los siguientes apartados: Certificaciones, Cursos, Reconocimientos y premios, Idiomas, Patentes, Proyectos, Publicaciones.
El apartado Cursos está destinado, sobre todo, a formación no reglada que quieras destacar (para los títulos oficiales y la formación regalada recuerda que tienes la sección Educación). Aprovecha para incluir los que ayuden a definir tu propuesta de valor y afiancen las palabras clave de tu perfil.
También es recomendable que rellenes el apartado Proyectos. Contribuirás a darle mayor valía profesional a tu perfil.
Y ahora que ya sabes cuáles son los cambios más recientes (e importantes) del diseño del perfil de LinkedIn, ¡a darle caña! Recuerda siempre que es tu imagen profesional lo que está en juego.
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